Las tres (o cuatro) eras de la estadística

Las cosas, frecuentemente, son como son y no de otra manera, especulativamente, mejor por razones históricas. Es lo que hay. La respuesta a muchas preguntas es “porque A llegó antes que B”.

La estadística (y particularmente, la que se enseña) es como es y no de otra manera, especulativamente, mejor, también por razones históricas. Por eso siempre pierdo algo de tiempo hablando (¡es uno de mis personajes favoritos del XIX!) de Quetelet y los suyos; luego, de Fisher y compañía; finalmente, de Efron y los demás.

Me reconforta averiguar indirectamente de que este último, Efron, en Large-Scale Inference: Empirical Bayes Methods for Estimation, Testing and Prediction, distinga esencialmente las mismas tres grandes épocas que yo (a las que suelo añadir una de prehistoria): véase la primera parte de la introducción.