Sobre lo de Ariely, Gino, etc.
I.
Hay tres motivos por los que me interesa esta historia que, creo, serán compartidos por mis lectores:
- Dice mucho sobre la recocina donde se prepara eso que llaman ciencias sociales.
- Tiene mucho interés estadístico, es material docente de primera.
- Y, sobre todo, ¡es tan ameno!
II.
En 2012, cinco autores —Shu, Mazar, Gino, Ariely y Bazerman— que pertenecían a dos grupos de investigación distintos que trabajaban sobre un mismo asunto, decidieron publicar un artículo conjunto con tres estudios que apuntaban en una misma dirección: Signing at the beginning makes ethics salient and decreases dishonest self-reports in comparison to signing at the end.
El más famoso del todos es Ariely del que incluso pensaba que había escrito en estas páginas a cuenta de su famoso libro sobre economía conductual (y que leí en su época).
III.
En 2021, los autores de Data Colada denunciaron cómo los datos usados en uno de los estudios estaban manipulados. El artículo fue retirado y trascendió que los datos en cuestión habían sido aportados y analizados por uno solo de los coautores, Ariely.
Es muy entretenido leer el artículo original —donde los coautores escriben muy unánime y solidariamente cosas como nosotros obtuvimos, nosotros analizamos, nosotros…, nosotros siempre a una, como los tres mosqueteros— y compararlo con los comentarios que cuatro de ellos (Nina Mazar , Francesca Gino, Dan Ariely y Max Bazerman) hicieron públicos una vez se reveló el fraude y que no se quedan cortos en admisiones del tipo: yo no miré eso, yo me fié, de eso se encargó otro, yo me enteré por la prensa, etc.
IV.
Merece especial atención el de Francesca Gino, de la que se supo que, después de manifestar por escrito su indignación por el caso y su compromiso con los altos estándares de la integridad profesional, no solo había falsificado también los datos en la parte que le correspondía del artículo sino también los de otras tres de sus publicaciones de 2014, 2015 y 2020.
Se le abona en todo caso que, en coherencia con lo que dijo y tal vez sintiéndose injustamente acusada de hechos que no reconoce, en lugar de admitir el fraude, haya demandado a quienes sacaron a la luz el asunto.
V.
Además, su línea de defensa consiste en rebatir los aspectos técnicos de quienes la acusaron. Lo cual ha generado una cantidad adicional de material de interés estadístico de entre el que rescato:
- Las refutaciones que hace Francesca Gino de los análisis de los datos originales que motivaron la acusación de fraude (este y este).
- Una refutación de las refutaciones
- Y otra más en forma de hilo de Twitter
Nadie podrá quejarse de que no traigo salseo del bueno a estas páginas.