Un acto fallido: la pregunta sigue, pues, abierta

Jot Down es una publicación recomendable. Aunque frecuentemente peque de a lo que tienden las publicaciones de letras (en el sentido menos amable del término): que prime el escribir bonito sobre la sustancia, el argumento y su coherencia.

El artículo que motiva este se anuncia como Especulación inmobiliaria, tradición centenaria y recoge tres episodios (¿anécdota? ¿categoría?) bien conocidos pero florida y amenamente descritos:

  • El del duque de Lerma a principios del XVII.
  • El del marqués de Salamanca, en el XIX.
  • El que se deriva de la ley del suelo de 1998.

Se habla abundantemente de los aspectos negativos de los tres (recuérdese: de letras). Al tratar el último, el más interesante en términos efectivos, se arrima pero no llega a plantear (y, por supuesto, tratar de dar respuesta a) la pregunta más obvia. Es algo así como si en una película de intriga, en los últimos minutos, tras la escalada de la tensión, en lugar de resolver el misterio e identificar y detener al asesino, cambiase súbitamente el género y una horda de zombis se comiese el cerebro de todos los implicados.

p-valores y el perro que no ladró

Tengo un montón de artículos por ahí guardados que fueron escritos a raíz de la publicación de The ASA’s Statement on p-Values: Context, Process, and Purpose, ya en 2016, que ponía en cuestión el uso indiscriminado y acrítico de los p-valores. Algunos de ellos son este, este, este o este.

Asunto que se refiere a y abunda en todo lo que se ha escrito sobre la llamada crisis de replicabilidad, sobre la que también se ha escrito largamente.

Todos los seres vivos necesitan agua y las rosas necesitan agua, luego las rosas son seres vivos

El razonamiento que titula la entrada es falso. Pero tendemos a darlo por bueno si no pensamos demasiado (o despacio, en terminología de Kahneman) porque la conclusión es cierta.

A menudo, tenemos tantas ganas de llegar a una conclusión que nos parece tan justa y necesaria, que damos por buena cualquier manera de alcanzarla.

Coda: Sin método somos esclavos de nuestras prioris.

data.tree: porque no todos los datos son tabulares

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De acuerdo, casi todos los datos son tabulares. Digamos que el 90% de ellos. Pero muchos de ellos, no. Y data.tree es un paquete con muy buena pinta para manejar estructuras arborescentes de datos: véanse esta y esta viñeta.

Como no podía ser de otra manera, tiene funciones para recorrer, filtrar y podar los árboles de datos.

La aplicación gracias a la cual di con él es el paquete prof.tree, que es lo mismo que el Rprof de toda la vida… solo que mola más:

Fui a Costa Rica y volví convencido de que el Índice Goblal de Felicidad es una basura

Hace unos años se oyó un runrún en pro de sustituir el PIB por un índice alternativo con el que comparar el desempeño de los países (más, p.e., aquí).

En el Índice Global de Felicidad, una de las alternativas propuestas que coordina la ONU, Costa Rica tiende a ocupar niveles altos (el 13 este año, acompañando a países tales como Austria, Irlanda o Alemania), mientras que España se encuentra en el puesto 36, por debajo de Malasia y un pelín de gato por encima de Colombia (sí, Colombia).

Siete años después, dejo la presidencia de la Comunidad R Hispano

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Eso, que dejo la comunidad de la Comunidad R Hispano. Ocho años después, que ya son. La noticia, en todo caso, no es tanto que abandone la presidencia sino las circunstancias que me condujeron a ella. Noticias viejas, pero noticias al fin y al cabo, que sirven para entender por qué lo fui entonces y por qué dejo de serlo ahora.

La Comunidad R Hispano (por qué se llama así y no, como habría sido natural, Asociación Española de Usuarios de R, es una larga historia que tal vez cuente algún día) se fundó en Madrid hace ocho años en el seno de las III Jornadas de Usuarios de R (a todo esto, esa página la hice yo en html puro y con vi como editor), cuando la comunidad (informal) de usuarios de R ya llevaba un tiempo desarrollando actividades.

Libros y el índice de compresibilidad

Los libros contienen palabras e ideas. Un libro con un índice de compresibilidad del 0% es uno para el que transmitir el, p.e., 30% de las ideas que contiene hacen falta, como poco, el 30% de las palabras. Muchos libros de matemáticas o estadística tienen ratios de ese nivel.

El otro día leí una entrada de blog en la que alguien le hacía un 80:20 a un libro que había leído. Que viene a significar que el autor del texto original era uno de esos tipos palabreros que se escuchan a sí mismos y que no tiene respeto alguno por tu tiempo.

¿Tiene sentido plantearse un objetivo que no se puede medir?

Por ejemplo, el de la igualdad. Aquí un artículo en el que se dice que no y otro del mismo autor en el que se dice que sí (parece que todo se reduce a cuestiones metodológicas).

Este tipo de cuestiones suelen zanjarse creando una metodología y encargando al INE su seguimiento. El INE, entonces, define desigualdad (para el caso) como aquello que mide nuestra metodología de medición de la desigualdad (fenómeno que llaman reificación y que consiste en sustituir la sustancia por el método). Lo mismo pasa con el desempleo, el PIB y tantas otras magnitudes.

Sobre Madrid Central

[Lamento hacer una entrada que difícilmente encaja con el resto de las que suelo tratar por aquí. Pero son tantos los que preguntan mi opinión al respecto que he optado por redactarlas y contestarles con una url.]

Lo de Madrid Central no se ha notado en absoluto en mi barrio. Ni se notará. Vivo en una de las antiguas APR (áreas de prioridad residencial) de Madrid, que existen desde la noche de los tiempos y que son una especie de mini Madrid Central:

¿Inmigración cualificada en España? Pues va a ser que no

Hace unos años, una empresa Suiza se puso en contacto conmigo, nos gustamos mutuamente y allá que me fui a teclear como empleado suyo. Pero supongamos que una empresa española se pone en contacto con un estadístico de Senegal, se gustan mutuamente y se lo quiere traer. ¿Puede?

NO, NO, NO, no puede. No le dejan.

Porque para que el estadístico senegalés pueda trabajar, por ejemplo, en Albacete, hace falta que la profesión de estadístico aparezca en el Catálogo de Ocupaciones de Difícil Cobertura de Albacete. Si no aparece en la lista, solo pueden contratarse estadísticos comunitarios (o suizos).