Derecho

Más ideas alrededor de la sentencia de lo del bono social de la luz

[En esta entrada abundo en lo escrito la semana pasada sobre el mismo asunto centrándome esta vez en la extraña interpretación que hace el derecho de la automatización, los algoritmos, la IA y todas esas cosas.]

I.

Comienzo con un par de historias que al principio podría parecer que no vienen al caso.

Realicé mi primera declaración de la renta allá por el 93. En esa época, uno iba a un estanco y por 45 pesetas adquiría un sobre grande en el que venían:

Ideas alrededor de la sentencia de lo del bono social de la luz

I.

En España se ideó un sistema para que los menesterosos disfrutasen de luz cuasigratuita al que se le dio el nombre de bono social eléctrico (o similar). Para recibirlo, el interesado tiene que acreditar una serie de hechos objetivos; luego, un algoritmo determinista —del que la ley y sus reglamentos son el seudocódigo— determina la procedencia o no del bono. Ese algoritmo se implementó en un programa llamado BOSCO.

Sobre la "Carta de Derechos Digitales"

No cualquier ministerio sino precisamente el de economía (lo subrayo: es muy relevante para lo que sigue) ha colgado de su portal una (propuesta de) Carta de Derechos Digitales para su pública consulta.

Se trata de un documento confuso, en el que se mezclan propuestas que afectan a ámbitos muy heterogéneos, desde el transhumanismo,

[L]a ley regulará aquellos supuestos y condiciones de empleo de las neurotecnologías que, más allá de su aplicación terapéutica, pretendan el aumento cognitivo o la estimulación o potenciación de las capacidades de las personas.

Antropocentrismo cansino

Es muy cansino. No hay debate sobre big data, inteligencia artificial o similar en el que no pase: de repente lo captura alguien (con pinta de no haber tirado una maldita línea de código en la vida) llevándoselo al tema con el que asustan a las porteras: ¡oh, oh, oh, la protección de datos!, ¡la nueva normativa europea! Que si Facebook sabe lo que hiciste, que si Google conoce tus amigos, que si…

¿Cuántos culpables son declarados inocentes por un juez?

Desde un punto de vista estrictamente legalista, ninguno. Pero todo sistema de decisión está expuesto tanto a falsos positivos como a falsos negativos. Creo entender que nuestro sistema legal, el español, es especialmente garantista, i.e., que prefiere los últimos a los primeros.

Pero, digan lo que digan los juristas, el asunto de los falsos negativos es real y tiene su coste social. Además, y por eso lo traigo al blog, tiene una interesante lectura probabilística y participa extremadamente del habitual problema de la indisponibilidad de datos fehacientes. Todas estas cuestiones las trata (en el contexto estadounidense, advierto) esto que enlazo.

En contra del estado "de derecho"

Nos engañaron malamente. Nos prometieron que estudiar matemáticas nos abriría la puerta de los misterios más sutiles del conocimiento y ahora no hacemos otra cosa que celebrar como gilipollas el día de $latex \pi$ a golpe de retuiteo. Nos dijeron que aprendiendo ingeniería conoceríamos el funcionamiento de las cosas y acabamos usando ordenadores armados con pegamento. Con la estadística seríamos capaces de estudiar y entender los movimientos y cambios sociales, el funcionamiento de los mercados financieros, etc. y nunca pasamos de los k-vecinos.