Opciones

Computación cuántica en Barcelona (al lado de ALIA) y algunos asuntos más

Mandar una petición a un LLM equivale a usar un ordenador (bastante potente) un ratico. El consumo de electricidad no puede ser tan alto. Tiene que ser infinitamente inferior al de actividades cotidianas que involucren calentar cosas, por ejemplo. Pero el que quiera los números concretos, puede echarle un vistazo a Individual AI use is not bad for the environment.

LLMs a los que se pregunta por una variante del tres en raya, consistente en rotar el tablero 90 grados. Sus respuestas, todas desatinadas —de otra manera, ¿se habrían publicado los resultados?—, aquí.

Los ingleses me descolocan

Los ingleses me descolocan. Hace unos días me enteré de una propuesta de George Osborne, el ministro de hacienda del Reino Unido, que se conoce como shares for rights (acciones a cambio de derechos). Consiste esencialmente en ofrecer a los empleados la opción (nunca la obligación) de recibir una recompensa económica a cambio de que renuncien a una serie de derechos laborales.

Nótese que se trata de una opción. Y tener opciones es bueno. Al menos, para homines œconomici.