¿Admitirá finalmente el DLE la acepción "algoritmo" de "logaritmo"?

Estaba ayer todavía en la cama a una hora muy aristocrática cuando en RNE invitaron a un presunto experto en big data a hablar de quién sabe qué. Aquel pobre hombre habló sobre los problemas que plantean, en particular, los logaritmos. Cuando quería decir, claro, algoritmos.

No es la primera vez que lo oigo. Aunque sí la primera en un medio formal. Al menos, oral. Pero cualquier día vemos la ignorancia plasmada en negro sobre blanco, recogida por un lexicógrafo y elevada a categoría en forma de definición del DLE. Con las cocretas y demás.

¿Qué hacer? Por mi parte, he decidido practicar la santa intransigencia con el transgresor. Porque, o detenemos esta tendencia o nos contaminan la acepción de logaritmo (que significa una sola cosa y la significa bien) con ocurrencias de don hice-efepé-dos-acabé-de-comercial-en-X-y-me-llaman-a-la-radio-a-hablar-de-lo-que-me-viene-grande.