Una serie de asuntos sobre encuestas, mercados de predicciones y su intersección
Este es un largo artículo largo de Andrew Gelman sobre lo que fue el gran pequeño tema de hace unas semanas: ¿funciona eso de preguntar en las encuestas sobre lo que opinan los vecinos o familiares de los encuestados? ¿Qué nos dice la evidencia?
Escribí una vez (aquí) sobre las cuestiones éticas y económicas que subyacen en los mercados de predicciones. El resumen es más o menos que generan grandes externalidades positivas pero que los agentes no pueden internalizar suficiente valor como para que operen por sí mismos, es decir, sin incentivos externos. Pero el hecho de que se intenten manipular (como aquí) es, en el fondo, una buena noticia: no son irrelevantes.
Andrew Gelman, de nuevo, predice el papel futuro de los mercados de predicciones dentro del entramado de las predicciones electorales: que se convertirán en un ingrediente adicional en lugar de en un sustituto.
Dentro del debate sobre si reemplazar el censo clásico por un sistema basado en registros administrativos, The Economist ha publicado una pieza muy recomendable: Counting Britain’s beauties and leech-bleeders. Además de lo sustancial, viene plagado de anécdotas simpáticas, como por ejemplo esa de que Galton intentó en su día estudiar la distribución de la belleza femenina en el RU (la historia está mejor contada aquí).