Estadística

Ajustad vuestras prioris: la mayoría de los "programas sociales" carecen de efectos positivos

Muy frecuentemente, economistas, sociólogos, etc. publican artículos en los que se recoge la evaluación de algún tipo de programa social: políticas activas de empleo, cheques de nosequé, etc. Para ser publicados, como siempre, estos estudios tienen que tener las tres propiedades habituales:

  • No ser obvios.
  • Ser interesantes.
  • No ser manifiestamente falsos (es decir, que de serlo, no se note demasiado, posiblemente, haciendo uso de tahuromaquia estadística).

Esos resultados son datos observacionales que tenemos que componer con una priori para corregir el entusiasmo de los investigadores y ese amor tan cegador que suelen acabar desarrollando por el objeto de sus pesquisas. Pero, ¿cuál usar?

17 no es estadística

Me llama la atención El problema de la mortalidad infantil en Melilla que ningún científico logra resolver. Porque la tasa de mortalidad infantil sea alta (alrededor de 11 por cada 1000 nacimientos). Y porque ningún científico, parece, sea capaz de resolver el misterio.

Igual es porque no han llamado al científico adecuado. Porque con 17 neonatos fallecidos al año, basta con repasar uno a uno los casos y poco más para averiguar por qué. Llevaría, a lo más, media mañana.

Trucos cutrebayesianos

El contexto

Cada día $latex i$ ocurren eventos de cierta naturaleza (transacciones, fallecimientos, infartos, etc.) que interesa contar.

El problema

El número de eventos $latex n_i$ que ocurren el día $latex i$ no se conoce el día $latex i$ sino que va siendo conocido progresivamente los días $latex i+1, \dots$. Pero hace falta una estimación de $latex n_i$ antes del fin del mundo.

Los datos

  • La distribución de los $latex n_i$ (basados en el histórico).
  • La proporción (probabilidad) $latex p_\Delta$ de eventos del día $latex i$ que se conocen el día $latex i+\Delta$.

La solución prebayesiana

Pues los SVMs, al final, no son tan exóticos

Impartí un curso sobre máquinas de vector soporte (SVMs en lo que sigue) en Lima el pasado mes de agosto.

Las SVMs (o más propiamente, los clasificadores de margen máximo) son exóticos dentro del repertorio del científico de datos. Lo que buscan es un hiperplano que maximiza el margen entre tirios o troyanos,

con o sin penalización para los puntos que insisten en permanecer en la región del espacio que no les corresponde. El modelo se ajusta resolviendo un problema de minimización inhabitual: uno de los llamados programas cuadráticos convexos. (Del que no nos tenemos que preocupar habitualmente porque delegamos la resolución en el software).

Predecir a los predictores por incordiar

Sirve esta entrada para hacer saber lo fundamental del trabajo de fin de master (TFM en lo que sigue) de Susana Huedo (que busca trabajo y es una chica muy sabida, aplicada y espabilada) en el CIFF. Los TFM que propongo y acabo supervisando jamás tienen vocación de criogénesis anaquélica. A Susana le sugerí un tema muy punk y con recorrido: [tratar de] predecir a los predictores. Fundamentalmente, para joder.

Los chefs de encuestas electorales tienen dos discursos —uno previo y otro posterior a la publicación de los resultados—, una serie de recetas y datos que solo excepcionalmente publican. Dirán que se ciñen a una metodología científica, etc. Literatura.

Gelmaneando

Hoy, gelmaneo así:

bar <- function(n, reps = 1e4){
  foo <- function(n){
    x <- rnorm(n)
    tmp <- t.test(x)
    c(tmp$p.value, abs(mean(x)))
  }

  res <- replicate(reps, foo(n))
  tmp <- t(res)
  tmp <- tmp[tmp[,1] < 0.05,]
  tmp[,2]
}

res <- lapply(c(3, 10, 20, 50, 100), bar)
sapply(res, mean)
#[1] 0.8662636 0.6583157 0.4934551 0.3240322 0.2337086

Resumo:

  • Fabrico un montón de errores de tipo I. Recuérdese: error de tipo I implica artículo publicado.
  • Hago variar el número de sujetos (3, 10, etc.), n.
  • Mido el tamaño (promedio) del efecto, E; el estudio de su distribución, ejercicio para el lector.

Y efectivamente, E es función decreciente de n.

Estereotipos y estadística (II)

Hace tiempo escribí:

El porcentaje de mosquitos que pueden transmitir enfermedades es pequeño, muy pequeño. Sin embargo, decimos mosquitos transmiten enfermedades sin empacho.

Un porcentaje mucho mayor de los libros tienen tapas blandas. Sin embargo, no decimos que los libros tienen tapas blandas.

(Las frases anteriores no son estrictamente mías: en el enlace hay otros enlaces a sus fuentes y autores).

Hoy leo en el periódico un artículo que lleva por título ¿Por qué los hombres matan a las mujeres?

Dudas ¿razonables? que me asaltan

Casi siempre que leo artículos como La pobreza severa baja en España pero la desigualdad no se corrige en que se habla de pobreza, renta, deciles y demás, me asaltan siempre las mismas dudas que no sé si razonables o no. Sobre todo cuando enfatizan la situación de los deciles más extremos.

Porque nací en un barrio popular, vivo en otro y tengo más conocidos en Entrevías que en Puerta de Hierro. Y sé de quienes viven de dar palos en camiones, de quienes trapichean con todo tipo de sustancias, de quienes compran aquí y venden allá al tacataca, de los que tienen beca pa’tó y, además, un patinete eléctrico para cada churrumbel, etc. Imagino que en algún sitio morarán los y las meretrices que pueblan la noche madrileña y, en definitiva, los beneficiarios de un buen pedazo de ese 20% de la economía que se estima sumergida.