Acerca de "Ver como un mercado"

Tienen que alinearse unas cuantas circunstancias poco probables para que lea sociología. Dos de las más relevantes para que metiese la nariz en Seeing Like a Market son que:

  • conocía a uno de los autores por tener un librito decente sobre visualización de datos con R y que
  • Seeing Like a State es uno de los pocos PDFs que han pasado por mi disco duro y han sobrevivido a rm.

Tienen que darse, además, circunstancias adicionales para que acabe comentándolo aquí. Un artículo de sociología se refiere a fenómenos sociales más o menos concretos y, en este caso, parte de esos fenómenos tienen que ver con cosas como la creación de modelos estadísticos, el uso de ciertas variables en ellos, su uso, ¡su intención!, sus sesgos, etc. Si uno quiere ver lo que dicen los sociólogos —aquí generalizo de forma impropia pero consciente— de nosotros, de lo que hacemos, de por qué lo hacemos, etc., que lea el artículo y lo descubrirá por sí mismo.

Y unas cuantas notas finales que pudieran ser útiles para interpretarlo:

  • La sociología, en el fondo, es como la estadística. Por un lado tienes el mundo y por el otro, unas cuantas herramientas predefinidas para interpretarlo. Los estadísticos usan el t-test, PCA o ANOVAs, etc., que inventaron algunos señores que ya están muertos. Los sociólogos, cosas que dijeron Weber, Marx o algún otro señor igualmente fallecido. Al final, se trata de hacer encajar los hechos a las herramientas; de otro modo, solo estarías diciendo cosas sobre el mundo, pero no haciendo estadística o sociología, según el caso.
  • Una de las dos grandes diferencias entre la sociología y la estadística, en todo caso, estriba en que en estadística estudiamos (o deberíamos estudiar) el ajuste de los modelos. (La otra es que en estadística no damos por hecho de que todo está pensado para dar por saco a los pobres).
  • Yo no sé de sociología, pero sí de hechos y modelos de dichos hechos. Cuando conozco unos hechos y me ponen delante un modelo —sea de naturaleza física, sociológica, económica, etc.— sé decir si encaja, si es mínimamente compatible con aquellos, o si no tiene ni pies ni cabeza. De eso vivo. Es estresante leer un artículo cuando tu sentido arácnido hace sonar la alarma cada párrafo y medio.